NADIE

Dos escaladores subiendo a la luna desde la cima del Pedraforca

NADIE

Deseo el conocimiento,

primario, seminal,

aquel que no precise

ser expresado; natural,

claro, transparente.

Saber porque brota la fuente

de forma incesante, …

como mi sangre.

Darle sentido a la palabra amor,

conocer su química.

No deseo tu conocimiento,

pues me contamina,

deseo proyectarme

cual saeta mágica

que acierte a tu corazón.

¿Cómo puedo amarte

sin entenderte?.

Deseo transmutar la conjetura

para hacerla realidad,

liberar el verbo y la palabra,

conocerme para conocerte,

sentirme para sentirte,

amarme,… para amarte.

Corroer con el ácido de la experiencia

la palabra impresa

y beber del fluido

de la palabra ajena,

para ser pródigo en lenguas.

Verter la amarga hiel

de nostalgias mal vividas

en la oscura cueva del olvido,

como se derrama el sexo

en tu humedad.

Proyectar mi nada

contra el todo universal

mostrándome su etericidad.

Crepitar en la crepitación,

suspirar con el suspiro,

gemir con el gemido.

Aspiro a todo y todo tengo,

porque nada me falta.

Me columpio en el vértice de la luna

porque así me place.

Sacramento mi espera

y consagro el mañana,

porque sé que nunca

viviré en él.

Aun repitiendo mil veces te amo,

nadie lo escucha,

nadie lo entiende,

porque a nadie hablo,

a nadie quiero,

a nadie me doy,

a nadie espero,

pues nadie es mi amigo

y a el le entrego estas palabras,

pues nadie las recibirá

y comprendiéndolas las amará.

Si tu eres esa nadie,

que suerte que ahora

estés junto a mi.